Os dejo con un pequeño vídeo de Groenlandia que tenia guardado por ai haber si os gusta
lunes, 9 de octubre de 2017
lunes, 15 de mayo de 2017
Entrevista en Turiski, Fermin Perez "el kayak extremo vive un momento increible en Pirineos"
Se acerca la séptima edición de la River Guru Extrem Race, que se celebra, los días 27 y 28 de mayo, en Torla (Huesca) y en el cauce del rio Ara. La competición de kayak extremo más importante de la vertiente de los Pirineos españoles. TURISKI ha entrevistado a la alma mater de la organización, Fermín Pérez Larrea,(Agoitz, 1981) de River Guru, empresa de actividades de aventura, además de palista e instructor de kayak y rafting titulado.
-La competición de kayak extremo River Guru Extrem se ha consolidado en el Pirineo aragonés y se ha convertido en la más importante de España, pero lamentablemente no hay más pruebas de este nivel en el Pirineo español ¿Por qué?
-El kayak extremo es un deporte que en la actualidad no está reconocido dentro de las modalidades del piragüismo. Nos engloban dentro del kayak recreacional y eso hace que cualquier competición que organicemos no tenga ninguna ayuda por parte de las federaciones. Es un deporte en auge, pero exige mucho entrenamiento y técnica y se diferencia perfectamente de las modalidades que ya existen como el freestyle, el slalom o el descenso. Aprovecho para reclamar el reconocimiento del kayak extremo en el organismo internacional del piragüismo. El kayak de aguas bravas o descenso de ríos, kayak de montaña o kayak extremo, lo del nombre es lo de menos, debería ser una modalidad independiente y tener incluso competiciones.
-¿Pero muchos de sus practicantes están federados?
Aunque estemos federados dentro la Real Federación Española de Piragüismo no recibimos ningún tipo de ayuda, lo cual hace muy complicado organizar pruebas de este tipo. Probablemente esta es una de las razones por la que no se hacen competiciones de kayak extremo en la península Ibérica.
-¿Cómo nació la River Guru Extrem?“Aprovecho para reclamar el reconocimiento del kayak extremo en el organismo internacional del piragüismo, como una modalidad.”
Comenzó hace 7 años como un proyecto para compartir y crear comunicación entre piragüistas de toda España que practicaban este deporte de manera aislada. El objetivo, a parte de la pura competición, era crear una concentración de piragüistas de alto nivel, donde los mismos pudieran medir sus fuerzas y compartir los avances en la técnica o navegación, para mejorar todos en conjunto. Y he de decir que el kayak en aguas bravas está viviendo un momento increíble en los Pirineos gracias a figuras como el francés Eric Deguil o los catalanes, Aniol y Gerd Serrasolses, que se han proclamado varias veces campeones del mundo en diferentes competiciones. Los tres son asiduos participantes de la River Guru Extreme.
-¿Hay alguna novedad en la competición con respecto al año pasado?
Este año como novedad tenemos nuevos patrocinadores y nuevas marcas de material de piragüismo que llegan a España de la mano de River Guru. Como las palas Ophion, kayak Liquid Logic y vestimenta Nookie. Son buenas marcas que estaban fuera del mercado español y que encontraremos el fin de semana del 27-28 en Torla. Hemos preparado un amplio espacio de exposición con ofertas especiales y test de material.
-Y a nivel de competición…
-El año pasado incluimos una prueba con salida en masa, pero que debido al gran caudal del rio Ara no pudimos completar. Se trata de una prueba masiva “Mass Start” que unirá el tramo del cañón entre Torla y Broto. La prueba es una salida masiva de piraguas que deben hacer un recorrido de larga duración en el menor tiempo posible, contando con que el número de participantes será muy alto mientras y que hay varios tramos del río que solo permiten el descenso de participantes de uno en uno. El resto del formato seguirá siendo el mismo: carrera sprint, cena popular, emisión de documental de kayak, sorteo de material, premio en metálico para el ganador.
-A parte de la competición, también estáis implicados en la parte didáctica de esta modalidad del kayak. Organizáis tres clínics ¿Qué pretendéis?
El kayak en aguas bravas es un deporte muy técnico y requiere seguridad dentro del entorno donde se practica. Con los “clinics” pretendemos acercar todo el conocimiento de las personas experimentadas a aquellos kayakistas que todavía tienen un largo recorrido y mucho por aprender. Los clinics que se impartirán tratan principalmente sobre los aspectos más cruciales de este deporte: navegación, técnica de paleo, lectura de río, seguridad y rescate. Bloques muy grandes como para enseñar en un día pero suficiente como para que la gente se dé cuenta de la importancia de los mismos. Mis compañeros explican, navegación, técnica de paleo, lectura de río, como organizar un descenso y otros aspectos.
-Y en el que das tú sobre seguridad y rescate ¿Qué explicas?“Con los “clinics” pretendemos acercar todo el conocimiento de las personas experimentadas a aquellos kayakistas que todavía tienen un largo recorrido y mucho por aprender.”
-La seguridad y el rescate son los aspectos más importantes a la hora de salir a la montaña a descender ríos. Durante el clinic trato de concienciar a los piragüistas de los peligros que acontecen en el río y ayudo a identificarlos, reconocerlos y saber actuar en consecuencia, para hacer su práctica más segura.
Pero sé que la gente quiere disfrutar de los deportes de aventura incluso cuando implican un riesgo, por ello trabajamos también el tema del rescate. Como prevenir y actuar ante situaciones peligrosas en el río. Utilizamos los elementos de seguridad básicos y que todo kayakista puede llevar consigo al agua, tales como cuerda de rescate, mosquetones o cordinos.
En un curso de rescate, que habitualmente dura cuatro días, se enseña a utilizar diferentes técnicas básicas y avanzadas para socorrer a un kayakistya que está en apuros en un medio dinámico cómo el río. Aquí hago un pequeño resumen de los aspectos más importantes.
-Entre las actividades paralelas hay la proyección del documental “Humla”. Junto a Mikel Sarasola, Nacho Cinto y Asier Alemán formaste parte de la expedición que descendió por el rio Humla Karnali, el más grande del Nepal. Descender en kayak el Humla son palabras mayores. ¿La expedición debió dar mucho de sí?
-Fue una aventura muy completa y con el espíritu de las expediciones antiguas, pocos recursos y mucha dedicación. En pleno himalaya combinamos montañismo y kayak en la misma expedición debido a lo remoto de la zona. Una aventura de verdad a la que nos dedicamos con cuerpo y alma. Durante un viaje tan largo pasan muchas cosas. En el trekking de aproximación Asier, el más joven de la expedición, tuvo problemas gastrointestinales. La expedición se tuvo que retrasar un día para que pudiera tomar fuerzas de nuevo, ya que su cuerpo había sido atacado por amebas del agua que bebimos. El lugar donde se sitúan las expediciones de kayak suele ser un una zona salpicada de poblaciones rurales y sin sistemas de depuración de las aguas, Los residuos generados por los animales y las personas no se tratan. Aunque parezca mentira uno de los mayores problemas a los que nos vimos sometidos fue, el conseguir agua potable o en buen estado. Todos los miembros del equipo nos pusimos malos en algún momento e incluso Nacho Cinto, uno de los componentes, tuvo que abandonar la expedición en la parte final debido a la falta de fuerzas provocada por una infección intestinal.
-¿En algún momento peligró vuestra integridad física durante la expedición?
-A nivel técnico de kayak todo salió de maravilla. Fueron cerca de 400 kilómetros en kayak. Nos compenetramos a la perfección y la parte más complicada, continuos rápidos de clase 5, la supimos gestionar satisfactoriamente. El río era más bonito de lo esperado y los rápidos bien continuos y con gran volumen de agua. El hecho de llevar toda la carga en el kayak, significaba una complicación extra pero trabajando en equipo realizamos un descenso seguro. Sin duda el descenso del “Humla Karnali” es una de las expediciones más míticas del Himalaya y la recuerdo con gran ilusión aunque me trajera unos cuantos “bichitos” en el sistema digestivo hasta el Pirineo.
Personalmente significó mucho para mí ya que con este río completaba el descenso de la mayor parte de ríos de Nepal que llevaba haciendo los últimos cinco años. El Humla es otro de los descensos que
¿Qué significa el proyecto de las “Once Fuentes” ?El proyecto ”Once Fuentes” es una iniciativa personal y tiene por objetivo descender las mayores ríos del planeta”
-“Once Fuentes” es un proyecto personal para descender las mayores fuentes de agua que encontramos en el planeta. El número 11 es simplemente simbólico ya que en muchos de los idiomas antiguos que he encontrado a mi paso el número 11 significa abundancia. Aun así para que el proyecto tenga una determinación trataré de abordar 11 destinos con un número indefinido de ríos. Es un viaje a los orígenes de la vida buscando el comienzo de los ríos donde las aguas fluyen con más fuerza.
-¿Cuáles son el resto?
-El proyecto se encuentra en la fase final con varias expediciones completadas entre las cuales me gustaría destacar los descensos en Patagonia, Amazonas, Colorado, Groenlandia, Himalaya, Mekong. Ahora, me gustaría sumar el Karakoram, Pamir, Las fuentes del Nilo y el Eufrates en un futuro. Durante más de 15 años, he viajado a más de 20 países y ahora quiero organizar las aventuras con un propósito, conocer los orígenes del agua en este planeta, un recurso muy valorado pero muy poco cuidado. Me gustaría concienciar de la importancia de tener unos ríos limpios para una sociedad sin enfermedades y con biodiversidad.
-¿Cuál es tu próximo destino soñado para una aventura de kayak extremo?.
-Ahora mismo estoy entre varios destinos que me gustaría visitar, entre ellos Pakistan y Tajikistan. Tanto el Karakoram como el Pamir son zonas muy poco conocidas en el mundo del piragüismo de aguas bravas y hay cosas muy interesantes por hacer. Las grandes montañas siempre tienen grandes reservas de agua y profundos cañones, dos elementos muy interesantes a la hora de elegir un destino atractivo para la aventura en ríos.
El proyecto ”Once Fuentes” me mantiene con mucha ilusión, pues tengo todavía muchos ríos por descubrir. Lo importante es no dejar de soñar y reinventarse uno mismo en busca de destinos escondidos que encuentro mirando los mapas, mientras cargo fuerzas en compañía de lo más importante, los amigos y la familia.
miércoles, 10 de mayo de 2017
Rafting diversion y seguridad: Entrevista en Oxigeno Magazzine.
Os dejo con una entrevista que me han hecho en la revista Oxigeno para aquellos que no hayáis podido leerla. El articulo es interesante para aquellas personas que nunca han hecho rafting o que están pensando en hacerlo en breve ya que aclara un poco los mitos y riesgos inherentes del rafting comencial o hecho por cuenta propia, espero que os guste.
El rafting es pura diversión. Eso sí, como todo deporte practicado en un medio natural poderoso como son los ríos, hay que tener en cuenta unos cuantos consejos de seguridad muy importantes.
Aprovechamos el artículo de rafting del número 96 para entrevistar al experto Fermín Pérez Larrea, de la empresa River Guru, presidente de AGA (Asociación de Empresas de Aguas Bravas), instructor White Water Rescue (Rescue 3) y guía internacional de rafting además de técnico deportivo en aguas bravas, esquí, barranquismo, escalada y montaña.
¿Consideras el rafting un deporte peligroso?
No, para nada. En mi entorno decimos que es mucho más peligroso desplazarse por carretera hasta el lugar donde se va a hacer rafting que el propio el descenso del río. Si acaso es un deporte que se realiza en un medio dinámico y desconocido para mucha gente que hace necesario el acompañamiento de un experto.
La práctica del rafting por cuenta propia sin embargo si puede ser peligrosa ya que exige ciertos conocimientos sobre hidrología y seguridad. El río es una masa de agua en movimiento que exige tomar decisiones de manera rápida y certera, y aquellos sin experiencia pueden verse envueltos en complicaciones.
Para el desarrollo de una actividad de rafting de forma segura el equipo debe estar al corriente de técnicas y navegación, lectura de río y equipo de seguridad pasiva que llamamos EPI, Equipo de Protección Individual (chaleco PFD, casco, neopreno…) Si es cierto que hay diferentes niveles de dificultad en el rafting que hacen referencia a diferentes factores: el tiempo que se debe estar en el agua, la dificultad técnica del río y el nivel físico exigido para la práctica.
En conclusión me atrevería a decir que conociendo el comportamiento del río y tomando ciertas precauciones la práctica del rafting es un deporte seguro, pero entrar a un rio de aguas bravas sin experiencia puede ser algo arriesgado.
¿Cuáles son las recomendaciones de seguridad previas para cualquier practicante?
– No ir nunca solo al río.
– Contar con equipos de seguridad pasiva adecuados a la actividad que se va a realizar.
– Saber nadar o en caso de ríos muy sencillos saber mantener la calma en el agua.
– Estar acompañado al menos de una persona con experiencia.
– No encontrarse en situaciones de embriaguez o pérdida de facultades físicas.
– Elegir un río acorde a las cualidades del equipo.
Ya en el agua ¿de qué consideraciones de seguridad no podemos olvidarnos nunca?
– Ajustarse bien el EPI (Equipo de Protección Personal) para su correcto funcionamiento:
– Dispositivo de ayuda a la flotación PFD,
– Casco específico para impactos de velocidad lenta homologación EN 1385,
– Neopreno o protección contra el frío
– No perder de vista a los compañeros.
– Navegar siempre rápidos que hayan sido analizados con anterioridad. A veces se puede analizar mientras de desciende y a veces es necesario parar en la orilla y evaluar el camino.
– No atar cuerdas o gomas a objetos que estén en el agua si no tenemos previsto como soltaros.
– No saltar de cabeza al agua ya que puede haber piedras en superficie.
¿Cuáles son los protocolos si te caes al agua?
El río es una masa de agua en constante movimiento y con un fondo desigual. El flujo tiende a ser regular con ligeras oscilaciones aunque observándolo con detenimiento es posible interpretar una dinámica constante. El movimiento del agua en la superficie indica a aquellos que saben “leer el río” lo que está sucediendo en la profundidad. Sin embargo hay una parte más complicada de interpretar que son los objetos atascados en el fondo del río (ramas, troncos u objetos sumergidos). Son obstáculos a evitar y por ello existe una recomendación universal que todo nadador debe seguir: se trata de evitar ponerse de pie dentro de una corriente cuando te cubra más de las ingles. Es peligroso ver un pie atascado mientras una corriente constante empuja nuestro cuerpo. Debemos evitar el contacto con un fondo del río que desconocemos.
En caso de caída al agua, adoptaremos la “posición de seguridad”, debemos dejar nuestro cuerpo flotar en la superficie del agua, boca arriba, con los pies río abajo listos para amortiguar obstáculos. Los brazos deben ir también en la superficie y colocados en cruz para ayudarnos a mantener la trayectoria deseada. Con una mirada hacia aguas abajo podremos visualizar la corriente y anticipar el camino que tenemos que recorrer por nuestra cuenta. Mantendremos esta posición hasta que consideremos que somos capaces de nadar por cuenta propia hasta la orilla, la balsa o alguna piedra donde podamos tomarnos un descanso.
Para el rescate de personas en el agua, existe un dispositivo llamado “cuerda de lanzamiento/rescate”. Es una bolsa de para lanzar con una cuerda que flota dentro. Cada guía lleva una en la cintura y debe explicar el funcionamiento y el protocolo que se debe seguir cada participante en caso de rescate. El sistema es muy sencillo, el guía lanza la bolsa mientras se queda con un extremo de la cuerda, mientras la persona que está en el agua agarra el otro extremo. Es una manera de “pescar” a la gente que cae al agua. Se recomienda tener práctica en rescate antes de llevar una cuerda al río, ya que puede ser muy peligroso.
Como guía ¿Tienes algún consejo de perro viejo para los novatos?
Cuando un guía comienza su formación, trabaja muy duro para aprender diferentes habilidades como, navegación, técnica, lectura de río… todas ellas habilidades personales que se aprenden con la práctica. A unos les cuesta más que a otros, pero al final todos terminan aprendiendo a bajar una balsa. Sin embargo la formación no termina aquí, el río es un medio muy cambiante y la seguridad es la parte más importante del aprendizaje. El guía es parte de un equipo que cuida de si mismo y de los acompañantes y esta es la parte más complicada del aprendizaje. Por tanto mi consejo va en ese sentido. Les diría a cada una de las personas que están aprendiendo a guiar, que cuando hayan terminado su formación, normalmente en su segundo año, que no se relajen y que sigan con el espíritu del aprendiz. Que queda mucho por aprender ya que en el río se crean situaciones muy inverosímiles y los guías tenemos que estar listos para resolverlas. Les diría que imaginen escenarios y traten de resolverlos mentalmente, si uno trabaja en un río constantemente y conoce los pasos complicados, puede imaginarse situaciones y como resolverlas, por ejemplo: vuelco de una balsa, corbatas o emperramientos de balsas en piedras, caída de personas al agua… son situaciones que pueden suceder y que debemos estar listos para solucionar. De hecho no tiene porqué sucederle a uno mismo, un compañero puede verse envuelto en una situación de este tipo y nosotros vernos obligados a ayudarle. Por eso mi recomendación es entrenar mucho sobre todo a principio de temporada, continuar nuestra formación, cuidarnos entre guías y cuidar a todo participante sin distinción de la balsa o empresa de rafting a la que pertenezca, y colaborar también entre guías y empresas. Creo que si un guía sigue esta filosofía va a ser difícil que le vaya mal.
Mi consejo para los que están empezando es que sean humildes, que se adelanten a las situaciones, que entrenen rescate, que se imaginen situaciones complicadas y que traten de resolverlas antes de que les toque solucionarlas en la realizad. Un guía es parte de un equipo y debe velar por la seguridad de todos los integrantes del mismo: tanto los componentes de su balsa como los de otras y por supuesto de sus compañeros. Por eso no sirve pensar que realizar las mejores líneas, y ser el más hábil en este sentido es una garantía de seguridad
¿Cuál es la peor experiencia que has tenido o hayas visto en un descenso de rafting?
Algo bastante desagradable para un guía de rafting es cuando las personas que vienen a hacer rafting subestiman la actividad y vienen alcoholizados. Es un momento desagradable porque pierden el respeto por la seguridad, aumenta la falta de atención o se exponen de mayor manera a una hipotermia. La actividad de rafting es algo emocionante por naturaleza y no necesita de incentivos para aumentar el grado de diversión, solamente estar dispuesto a pasarlo bien.
Y para rebajar el tono… ¿alguna anécdota divertida?
En México un compañero descendía con un grupo de amigos muy voluminoso. El río que descendían llevaba agua bastante templada por lo que el uso del neopreno no era necesario. Uno de ellos cayó al agua debido al golpe de las olas y el agua le dio un buen revolcón. Al subirlo de nuevo a la balsa el participante había perdido el bañador, el agua se lo había arrancado y él ni se había dado cuenta… Tuvo que hacer el resto del descenso envuelto en una manta térmica de color oro brillante.
En 2014 organizamos una expedición de rafting al Cañón de Colorado en EEUU. El descenso dentro del río duró 21 días en los que tuvimos que ser autosuficientes. Para los 16 componentes de la expedición llevamos 4 balsas de 5m de largo que transportaban comida y toda la intendencia necesaria para un viaje en autosuficiencia. Después de 19 noches en el agua la confianza con el río era total y queríamos acabar la expedición por todo lo alto. El caso es que al equipo no se le ocurrió otra cosa que atar todas las balsas entre ellas y crear una plataforma gigante para pasar la noche flotando rio abajo. Organizamos turnos de vigilancia y preparamos cena para tomar a bordo. Protegimos los laterales y fletamos un remo en cada esquina para poder conducir levemente la dirección de la plataforma y nos echamos al agua. El resultado fue una de las experiencias más increíbles que he vivido nunca, durmiendo bajo las estrellas, mientras recorríamos alrededor de 50km por el río.
River Guru es una empresa de deportes de aventura especializada en rafting, kayak y multiaventura situada en n Murillo de Gallego, Huesca.
974 38 32 87
www.riverguru.es
El rafting es pura diversión. Eso sí, como todo deporte practicado en un medio natural poderoso como son los ríos, hay que tener en cuenta unos cuantos consejos de seguridad muy importantes.
Aprovechamos el artículo de rafting del número 96 para entrevistar al experto Fermín Pérez Larrea, de la empresa River Guru, presidente de AGA (Asociación de Empresas de Aguas Bravas), instructor White Water Rescue (Rescue 3) y guía internacional de rafting además de técnico deportivo en aguas bravas, esquí, barranquismo, escalada y montaña.
¿Consideras el rafting un deporte peligroso?
No, para nada. En mi entorno decimos que es mucho más peligroso desplazarse por carretera hasta el lugar donde se va a hacer rafting que el propio el descenso del río. Si acaso es un deporte que se realiza en un medio dinámico y desconocido para mucha gente que hace necesario el acompañamiento de un experto.
La práctica del rafting por cuenta propia sin embargo si puede ser peligrosa ya que exige ciertos conocimientos sobre hidrología y seguridad. El río es una masa de agua en movimiento que exige tomar decisiones de manera rápida y certera, y aquellos sin experiencia pueden verse envueltos en complicaciones.
Para el desarrollo de una actividad de rafting de forma segura el equipo debe estar al corriente de técnicas y navegación, lectura de río y equipo de seguridad pasiva que llamamos EPI, Equipo de Protección Individual (chaleco PFD, casco, neopreno…) Si es cierto que hay diferentes niveles de dificultad en el rafting que hacen referencia a diferentes factores: el tiempo que se debe estar en el agua, la dificultad técnica del río y el nivel físico exigido para la práctica.
En conclusión me atrevería a decir que conociendo el comportamiento del río y tomando ciertas precauciones la práctica del rafting es un deporte seguro, pero entrar a un rio de aguas bravas sin experiencia puede ser algo arriesgado.
¿Cuáles son las recomendaciones de seguridad previas para cualquier practicante?
– No ir nunca solo al río.
– Contar con equipos de seguridad pasiva adecuados a la actividad que se va a realizar.
– Saber nadar o en caso de ríos muy sencillos saber mantener la calma en el agua.
– Estar acompañado al menos de una persona con experiencia.
– No encontrarse en situaciones de embriaguez o pérdida de facultades físicas.
– Elegir un río acorde a las cualidades del equipo.
Ya en el agua ¿de qué consideraciones de seguridad no podemos olvidarnos nunca?
– Ajustarse bien el EPI (Equipo de Protección Personal) para su correcto funcionamiento:
– Dispositivo de ayuda a la flotación PFD,
– Casco específico para impactos de velocidad lenta homologación EN 1385,
– Neopreno o protección contra el frío
– No perder de vista a los compañeros.
– Navegar siempre rápidos que hayan sido analizados con anterioridad. A veces se puede analizar mientras de desciende y a veces es necesario parar en la orilla y evaluar el camino.
– No atar cuerdas o gomas a objetos que estén en el agua si no tenemos previsto como soltaros.
– No saltar de cabeza al agua ya que puede haber piedras en superficie.
¿Cuáles son los protocolos si te caes al agua?
El río es una masa de agua en constante movimiento y con un fondo desigual. El flujo tiende a ser regular con ligeras oscilaciones aunque observándolo con detenimiento es posible interpretar una dinámica constante. El movimiento del agua en la superficie indica a aquellos que saben “leer el río” lo que está sucediendo en la profundidad. Sin embargo hay una parte más complicada de interpretar que son los objetos atascados en el fondo del río (ramas, troncos u objetos sumergidos). Son obstáculos a evitar y por ello existe una recomendación universal que todo nadador debe seguir: se trata de evitar ponerse de pie dentro de una corriente cuando te cubra más de las ingles. Es peligroso ver un pie atascado mientras una corriente constante empuja nuestro cuerpo. Debemos evitar el contacto con un fondo del río que desconocemos.
En caso de caída al agua, adoptaremos la “posición de seguridad”, debemos dejar nuestro cuerpo flotar en la superficie del agua, boca arriba, con los pies río abajo listos para amortiguar obstáculos. Los brazos deben ir también en la superficie y colocados en cruz para ayudarnos a mantener la trayectoria deseada. Con una mirada hacia aguas abajo podremos visualizar la corriente y anticipar el camino que tenemos que recorrer por nuestra cuenta. Mantendremos esta posición hasta que consideremos que somos capaces de nadar por cuenta propia hasta la orilla, la balsa o alguna piedra donde podamos tomarnos un descanso.
Para el rescate de personas en el agua, existe un dispositivo llamado “cuerda de lanzamiento/rescate”. Es una bolsa de para lanzar con una cuerda que flota dentro. Cada guía lleva una en la cintura y debe explicar el funcionamiento y el protocolo que se debe seguir cada participante en caso de rescate. El sistema es muy sencillo, el guía lanza la bolsa mientras se queda con un extremo de la cuerda, mientras la persona que está en el agua agarra el otro extremo. Es una manera de “pescar” a la gente que cae al agua. Se recomienda tener práctica en rescate antes de llevar una cuerda al río, ya que puede ser muy peligroso.
Como guía ¿Tienes algún consejo de perro viejo para los novatos?
Cuando un guía comienza su formación, trabaja muy duro para aprender diferentes habilidades como, navegación, técnica, lectura de río… todas ellas habilidades personales que se aprenden con la práctica. A unos les cuesta más que a otros, pero al final todos terminan aprendiendo a bajar una balsa. Sin embargo la formación no termina aquí, el río es un medio muy cambiante y la seguridad es la parte más importante del aprendizaje. El guía es parte de un equipo que cuida de si mismo y de los acompañantes y esta es la parte más complicada del aprendizaje. Por tanto mi consejo va en ese sentido. Les diría a cada una de las personas que están aprendiendo a guiar, que cuando hayan terminado su formación, normalmente en su segundo año, que no se relajen y que sigan con el espíritu del aprendiz. Que queda mucho por aprender ya que en el río se crean situaciones muy inverosímiles y los guías tenemos que estar listos para resolverlas. Les diría que imaginen escenarios y traten de resolverlos mentalmente, si uno trabaja en un río constantemente y conoce los pasos complicados, puede imaginarse situaciones y como resolverlas, por ejemplo: vuelco de una balsa, corbatas o emperramientos de balsas en piedras, caída de personas al agua… son situaciones que pueden suceder y que debemos estar listos para solucionar. De hecho no tiene porqué sucederle a uno mismo, un compañero puede verse envuelto en una situación de este tipo y nosotros vernos obligados a ayudarle. Por eso mi recomendación es entrenar mucho sobre todo a principio de temporada, continuar nuestra formación, cuidarnos entre guías y cuidar a todo participante sin distinción de la balsa o empresa de rafting a la que pertenezca, y colaborar también entre guías y empresas. Creo que si un guía sigue esta filosofía va a ser difícil que le vaya mal.
Mi consejo para los que están empezando es que sean humildes, que se adelanten a las situaciones, que entrenen rescate, que se imaginen situaciones complicadas y que traten de resolverlas antes de que les toque solucionarlas en la realizad. Un guía es parte de un equipo y debe velar por la seguridad de todos los integrantes del mismo: tanto los componentes de su balsa como los de otras y por supuesto de sus compañeros. Por eso no sirve pensar que realizar las mejores líneas, y ser el más hábil en este sentido es una garantía de seguridad
¿Cuál es la peor experiencia que has tenido o hayas visto en un descenso de rafting?
Algo bastante desagradable para un guía de rafting es cuando las personas que vienen a hacer rafting subestiman la actividad y vienen alcoholizados. Es un momento desagradable porque pierden el respeto por la seguridad, aumenta la falta de atención o se exponen de mayor manera a una hipotermia. La actividad de rafting es algo emocionante por naturaleza y no necesita de incentivos para aumentar el grado de diversión, solamente estar dispuesto a pasarlo bien.
Y para rebajar el tono… ¿alguna anécdota divertida?
En México un compañero descendía con un grupo de amigos muy voluminoso. El río que descendían llevaba agua bastante templada por lo que el uso del neopreno no era necesario. Uno de ellos cayó al agua debido al golpe de las olas y el agua le dio un buen revolcón. Al subirlo de nuevo a la balsa el participante había perdido el bañador, el agua se lo había arrancado y él ni se había dado cuenta… Tuvo que hacer el resto del descenso envuelto en una manta térmica de color oro brillante.
En 2014 organizamos una expedición de rafting al Cañón de Colorado en EEUU. El descenso dentro del río duró 21 días en los que tuvimos que ser autosuficientes. Para los 16 componentes de la expedición llevamos 4 balsas de 5m de largo que transportaban comida y toda la intendencia necesaria para un viaje en autosuficiencia. Después de 19 noches en el agua la confianza con el río era total y queríamos acabar la expedición por todo lo alto. El caso es que al equipo no se le ocurrió otra cosa que atar todas las balsas entre ellas y crear una plataforma gigante para pasar la noche flotando rio abajo. Organizamos turnos de vigilancia y preparamos cena para tomar a bordo. Protegimos los laterales y fletamos un remo en cada esquina para poder conducir levemente la dirección de la plataforma y nos echamos al agua. El resultado fue una de las experiencias más increíbles que he vivido nunca, durmiendo bajo las estrellas, mientras recorríamos alrededor de 50km por el río.
River Guru es una empresa de deportes de aventura especializada en rafting, kayak y multiaventura situada en n Murillo de Gallego, Huesca.
974 38 32 87
www.riverguru.es
domingo, 8 de enero de 2017
MISION GROENLANDIA 2016, CAPÍTULO FINAL, El descenso del río Kurssuaq
UN EQUIPO Y UN PROYECTO
Todo empezó en Nepal, organizando una ruta hacia las fuentes del río Humla Karnali. Sentados frente al lago de Pokara, Mikel comentaba su amor por los territorios fríos, áridos y extremos. Mientras ultimábamos detalles sobre el trekking a Simikot, me hablaba sobre Groenlandia, un territorio poco conocido pero que producía un especial interés en él.
A la vuelta de Nepal diseñamos un proyecto que consistía en explorar diferentes zonas de Groenlandia para encontrar ríos de aguas bravas navegables; ríos que nacieran en el campo de hielo y recorrieran una gran distancia hasta su desembocadura en el mar. Pero lo que más nos atraía era la posibilidad de navegar entre glaciares y témpanos de hielo en un río que jamás se hubiera descendido antes. Investigar, recorrer y ser los primeros en descender un gran río.
La logística es una parte muy importante de una expedición y en Groenlandia no resulta muy sencilla. Para ello tuvimos que recopilar información geográfica de muy diversas fuentes, entre las que se encontraba el glaciólogo vasco Eñaut Izagirre al que agradezco especialmente su colaboración. También debemos mencionar al piloto de hidroavión Thomas Bramer, con el que sobrevolamos los glaciares y ríos elegidos para la exploración.
A primeros de Agosto nos desplazamos a Groenlandia para comenzar a organizar la logística y 10 días más tarde partir hacia la exploración de los ríos “Kurssuaq” y "Qorossup Kugssuaq"
EL VUELO, PREPARANDO LA LOGÍSTICA.
Sobrevolar un territorio en Groenlandia es de por sí una actividad extraordinaria. Aun así para nosotros era un método de reconocimiento indispensable para desarrollar una expedición de mas de 10 días. Durante 3 horas sobrevolamos los fiordos al sur de Sermiliq grabando todos los fenómenos que sucedían en las montañas y ríos.
Cuando terminamos el vuelo analizamos toda la información en Nuuk, con la ayuda de los ordenadores descargamos toda la información a mapas. Con toda esa información desarrollamos un plan de ataque.
Las características del terreno en Groenlandia no nos daban muchas opciones. Debíamos ser independientes y autosuficientes. No teníamos acceso a ayudas externas. Recorreríamos las distancias de acceso a pie y descenderíamos a bordo del kayak. Para ello meteríamos todo el material de acampada, comida y ropa de vestir dentro del kayak. Usaríamos los kayaks como contenedores o mochilas para guardar todo el material y cargaríamos con el kayak en la espalda durante el acceso a pie. Una vez en el río, navegaríamos también con el material de acampada, comida, etc, dentro del kayak
De esta manera conseguiríamos una gran movilidad e independencia.
El primer río elegido fue el Kurssuaq, un gigante de agua gris situado a 6 horas de Nuuk. Nos desplazamos en lancha hasta la desembocadura y montamos campamento base.
El equipo. De izquierda a derecha, Edu Sola, Aitor Goikoetxea, Fermin Perez (Mino) y Mikel Sarasola |
COMIENZA EL ACCESO
Para acceder a las fuentes debíamos ganar 650m de altura que recorreríamos por laderas y lagos de montaña. Una vez en las fuentes podríamos empezar nuestro descenso hasta el mar. Para el ascenso elegimos seguir la cuenca de un río situado al fondo del fiordo Grædefior (Kangerdluarssuaq) que, por características extraordinarias, había perdido su caudal habitual y desde hace pocos años fluía por un nuevo cauce. El cauce antiguo se mantenía prácticamente seco, por lo que nos resultaría sencillo caminar con los kayaks en la espalda.
Comenzamos la caminata en un valle amplio y cálido, con abundante pesca y multitud de mosquitos. Equipados con las mochilas NRS, especiales para portear, cargamos con el kayak al más puro estilo Nepalí. Poco a poco fuimos ganando terreno mientras cruzábamos el arroyo una y otra vez.
Después de 4 días caminando por laderas inestables, llegamos un lago glaciar situado a mitad de camino. El lago nos permitía ganar terreno montados en los kayaks, algo que agradecimos mucho y aprovechamos para descansar piernas, entrenar brazos y avanzar más rápido.
Nuestro paso por el lago intermedio nos dio la oportunidad de hacernos a la idea de las dimensiones del río que íbamos a descender. El tamaño superaba las expectativas y los rápidos necesitaban un análisis exhaustivo antes de ser navegados. Una vez en la orilla apreciamos un caudal de cerca de 300 m3 por segundo o lo que es lo mismo 300.000 litros por segundo, tres veces más de los estimado. Indicativo de que las fuentes estaban todavía lejos.
La expedición se tomo un descanso mientras valorábamos continuar río arriba en busca de las auténticas fuentes o comenzar el descenso desde los lagos. No llevábamos comida para aumentar el número de días de expedición pero la idea de comenzar en el nacimiento era demasiado atractiva. Tocaría racionamiento de comida y seguir la exploración hacia las fuentes.
Aparcamos por unos días los kayaks en el lago y continuamos la exploración a pie. El terreno de montaña se volvió más agreste aunque poco a poco ganábamos terreno hacia el nacimiento. Tras 2 días de exploración encontramos la ruta que nos llevaría a los lagos superiores, a las verdaderas fuentes, a los que decidimos llamar coloquialmente, "Lagos de la Eternidad". Descendimos a por los kayaks y volvimos a subir a los “Lagos de la Eternidad”. Durante el acceso aprovechamos para analizar el río y hacernos a la idea de lo que nos esperaba durante el descenso en kayak. La valoración fue positiva aunque con ciertas reservas ya que el río se veía muy fuerte y grande.
A BORDO DE UN KAYAK
Recorrido realizado en kayak, alrededor de 90 km. Comienzo en el lago azul oscuro y terminamos en el mar |
Comenzamos el descenso sabiendo que nos íbamos a adentrar en terreno peligroso donde nadie antes había estado. Esto significa que podíamos encontrarnos situaciones complicadas. El mayor peligro al que nos enfrentábamos durante la navegación era perder el material. En caso de vernos superados por las corrientes y tener que abandonar el kayak, podíamos perder todo el material de campamento, comida y ropa seca que guardábamos dentro del kayak. Eso podría suponer tener que abandonar la expedición.
El descenso comenzó en el desagüe de los lagos superiores. Los primeros rápidos eran unas rampas de agua cristalina, fáciles de navegar y con un paisaje espectacular. Rápidamente llegamos a una hoya creada por la retirada de los glaciares. Enormes masas de hielo se abrían paso entre las montañas y creaban un ambiente mágico mientras seguíamos navegando hacia el norte. Después de 2 horas de navegación, los diferentes aportes de agua provenientes de los glaciares que teníamos alrededor multiplicaron el caudal del Kurssuaq y cambiaron el color del agua a un gris claro y arenoso. Continuamos la navegación con más cautela pero contentos con el ambiente que el río iba pillando.
Pocos km más adelante el valle giraba hacia el Oeste y se volcaba directamente sobre el hielo de un glaciar. La desembocadura del glaciar de 100m de altura sería una de las orillas del río. El río fluía cerca de 7 km paralelo al glaciar con una orilla de rocas y la otra de hielo. En ocasiones el glaciar soltaba pequeños desprendimientos de hielo al cauce. Modificando el mismo y haciendo imprevisible el comportamiento del agua.
Navegamos los 7 km de hielo sin parar, sintiendo una sensación de miedo y descontrol. Aun así disfrutamos de una experiencia única e irrepetible, solo posible en tierras polares y que nos llenó satisfacción. Cuando llegamos a los lagos intermedios era tarde y debíamos buscar un lugar para dormir. El primer día había sido muy intenso y debíamos buscar un lugar resguardado del viento.
Llegada del río a la primera confluencia, aumento importante del caudal. |
Aitor parando en la orilla entre icebergs con una pared de hielo de fondo |
Campamento en una isla frente al glaciar. Nos encontramos en el primer lago. |
Noches de campamento bajo las auroras boreales. |
Un largo paleo entre lagos y dos noches de campamento en islas, nos transportaron al "Desagüe de la Atlántida". Un auténtico embudo que hace de tapón frenando el lago inferior. El agua fluye por una cascada que finaliza en forma de rebufo después de rebotar en ambas orillas. Acampamos a orillas del rápido para poder analizarlo correctamente. El río continuaba sin descanso hasta lo que daba la vista. Esa noche dormimos poco.
A la mañana siguiente embarcamos debajo de la cascada evitando el rebufo. Entramos directamente en la acción con rápidos continuos, uno detrás del otro, encañonados y desordenados. La navegación resultaba impresionante, arriba y abajo movidos por la fuerza del agua, zarandeados por los cambios de velocidad y un poco más hundidos por el gran peso del equipaje que llevábamos dentro de los kayaks.
Nos organizamos por parejas y, mientras la primera pareja salía a la orilla y subía por la ladera para analizar los rápidos, la segunda pareja navegaba confiando en las indicaciones de los analistas. Cuando el río diera un respiro, la segunda pareja pararía en la orilla para analizar también los siguientes rápidos y de esta manera poder explicar a la primera pareja como navegar los mismos. El estilo dio sus frutos y avanzamos lentos pero seguros.
Navegamos dos cañones profundos con rápidos muy continuos hasta que el río nos dio un respiro. El cañón se mantenía pero los rápidos se iban a alternar con aguas más tranquilas. Perfecto para acampar y celebrar este magnífico día. Lo llamamos “Campamento Marciano”, porque sólo había roca y hielo, ni rastro de vida, y la luz brillaba por su ausencia. El hielo y el viento dentro del cañón enfriaban el ambiente, dándole un aspecto muy marciano. Esta noche hubo auroras boreales.
Los siguientes 4 días continuamos la navegación por el río mientras nos dábamos cuenta de la gran experiencia que estábamos viviendo. Estábamos navegando una autentica maravilla de río, con rápidos grandes y nobles, situados entre glaciares y grandes montañas de hielo. No queríamos que se terminara, pero lamentablemente llegamos al fiordo.
Rápidos continuos y con el río de orilla a orilla. |
Edu entrando a una olita simpática. |
Aitor en el tramo bajo del kurssuaq mucho mas grande y noble. |
Porteo en el tramo bajo del rio qurssuaq, El rio se desploma sobre rocas.. |
LLEGADA AL MAR
Después de 12 días de expedición llegábamos al fiordo. Habíamos recorrido cerca de 100 km a pie y otros 80km de río. Habíamos completado el primer descenso del río KURSSUAQ. Un auténtico gigante de las aguas bravas situado en Groenlandia. El campo base nos esperaba con abundante pesca y un tepee lleno de comida.
Si tuviera que definir el río, diría que “Tiene su comienzo en los lagos de montaña, se adentra en un glaciar multiplicando su caudal, desagua en lagos intermedios, escapa de los mismos por profundos cañones, continua por un territorio lunar salpicado de rápidos en una sección que bien podría ser uno de los mejores RAFTING del mundo y termina desplomándose al fiordo en una cascada gigante."
Campamento junto al mar. al fondo del fiordo el río Kurssuaq. |
lunes, 17 de octubre de 2016
Mision Groenlandia 2016. CAPITULO 2: Trekking por la ruta desconocida. Que nos espera?
Escrito por AITOR GOIKOETXEA
Amaneció como un día cualquiera, pero en nuestras caras se
reflejaba una sonrisa que tanto tiempo esperábamos que saliera. Nada más
despertar, nos miramos los unos a los otros y con emoción nos decíamos…. “Por fin esto empieza! No hay marcha atrás!
Yiiijaa!!” Con la incertidumbre de lo
que nos vendría más adelante, recogimos el campamento y comenzamos a montar
todo el tinglado para poder llevar el kayak a la espalda lo mejor posible.
La primera vez tardamos entorno a media hora en montarlo
(esperando que cada día fuese más rápido) y directamente pusimos los kayaks de
lado en los cargueros NRS. Este estilo de llevar los kayaks no muy conocido (lo
más utilizado es llevarlo de pie), fue una idea de Mino y Mikel, de cuando
estuvieron por las tierras nepalíes, donde vieron a los porteadores que
contrataron para hacer un porteo de más de
una semana probando todo los métodos posibles hasta que acabaron todos
de esta manera. Así que Edu y yo confiando en su criterio decidimos sumarnos al
nuevo estilo.
El primer día de trekking avanzamos más de lo que
pensábamos, no encontramos grandes dificultades ni mucho desnivel, pero sí
algunos tramos con mucha maleza y rocas lo que dificultaban y ralentizaban
nuestra marcha. Durante toda la travesía no había ningún tipo de senda hecha
por el ser humano así que no nos quedaba otra que confiar en los trazados
creados por el paso de los renos.
Mikel al inicio del trekking a punto de cruzar el río
¡Abriendo camino por donde se pueda! A la derecha se puede ver como sorteamos los sauces con el kayak arrastras
Durante el día inicial vimos que en el riachuelo por el que
andábamos había una masificación de truchas asalmonadas. Era el momento idóneo
para que Edu y Mino pusiesen en práctica su habilidad de pescar tan reconocida
en el mundillo del kayak. Sin la necesidad de usar más que una pita de 8m y una
cucharilla atada en su extremo, se dedicaron a sacar una presa tras otra en
todos sus lances. Al final, visto que eso podía convertirse en una
exterminación, pusimos como límite una hermosa pieza por cabeza para luego así
poder cenar bien a gusto.
Después de caminar
desde las 9am hasta las 8pm para solo hacer en torno a 8km, encontramos nuestro
recoveco idóneo a las puertas del primer cañón del recorrido. El campamento lo
montamos justo debajo de una cascada espectacular que salía directamente desde
un agujero en el techo de la montaña, un lugar extremadamente bonito. Durante
la cena empezaron a aparecer todo tipo de dolores en el cuerpo...
Aitor enganchado entre dos rocas, al fondo la cascada y nuestro futuro campamento
El día temible del trekking llegó, la etapa con mayor
desnivel, a lo que había que añadirle el cruce de un cañón. Lo primero, nada
más adentrarnos al cañón vimos que el río que lo surca llevaba poco caudal
posibilitando el caminar por sus escarpadas rocas. Fue una caminata muy lenta y
pesada pero todo malo tiene su recompensa, seguía habiendo un sinfín de peces
en las pocillas por lo que en una decidimos parar a descansar y cogernos
nuestra cena.
El cañón que nos ralentizó mucho la marcha
Una vez cruzado el cañón y haber recorrido unos kilómetros
por un terreno menos hostil, llegamos al segundo cañón, este sí que era
imposible remontarlo. Al final, después de barajar las escasas opciones no nos
quedó otra que subir un buen cacho empinado de la montaña, lo más duro del
trekking. Imaginaos con un kayak a la espalda con todo el material (entorno a
40kg) ¡trepar! por un terreno de piedrillas sueltas ascendiendo unos 100m y
tardando casi 2h, horrible.
Porteando el segundo cañón. Arriba a la derecha los kayakistas descienden la montaña con los kayaks en la chepa.
Destrozados físicamente pero mentalmente más fuertes que
nunca, decidimos hacer el máximo de distancia posible para ir ganando terreno.
Al final llegamos a una explanada, montamos nuestro campamento y aprovechamos
para recolectar arándanos (fruta que se encontraba por doquier) para picar y
madera suficiente para preparar un exquisito plato de truchas cocinadas a la
plancha al punto de sal.
Los días pasan volando,
pero el recorrido se hace eterno, y ya estamos en el día 3. Nuestros cuerpos
van dando avisos de flaqueza por culpa de toda la caña que les estamos dando pero
al estar tan cerca del inicio del río, la fuerza de nuestra mente se sobrepone
al cansancio físico y comenzamos con buen ritmo el día. Sin contratiempos,
después de comer, llegamos al primer lago que está al lado de otro lago donde
desemboca el glaciar desde el campo de hielo. Por fin nos desharíamos de tener
que cargar todo a la espalda y quedaba poco para adentrarnos en nuestro
terreno.
El lago que llega hasta el glaciar, nuestro campamento durante 3 días
Ya casi de noche y con la temperatura descendiendo
vertiginosamente, nos tocó palear 2-3h por el lago hasta llegar a una playa
(creada por el sedimento que trae el glaciar). Mientras se preparaba la cena,
sacamos el mapa y trazamos el plan de los siguientes días. Ya habíamos hecho lo
que, a priori era, lo más duro.
A la mañana siguiente decidimos dejar todo el material
pesado (kayaks, material,…) y cargamos con los imprescindible para sobrevivir 2
días. Nuestra idea no era otra que escoutear el río que llegaba al lago en
busca de su nacedero para así intentar alargar lo máximo el descenso.
Fueron cerca de 10h
de caminata, duro pero con unas vistas que pocas veces en nuestra vida vamos a
tener opción de volver a contemplar. Sabíamos, porque habíamos visto en google
earth que el río no nacía en el glaciar en el que estábamos, sino que venía de
más arriba, pero no teníamos claro que esa parte fuera navegable.
Durante el trekking primero vimos que el tramo del río que
cruzaba por el frente del glaciar llevaba más agua de lo que pensábamos, llenos
de icebergs que se habían desprendido de las paredes del glaciar.
Una vez alejados del frente del glaciar vimos que el río,
en la mayor parte, era un clase III-IV pero en un par de tramos se estrechaba
haciendo unos rápidos inmensos (clase burrada). Llegados al lugar donde se
encontraba el material previamente depositado (Mino y Mikel habían dejado algo
de material en este lago cuando sobrevolaron la zona en hidroavión) y después de
montar el campamento decidimos que lo ideal sería volver al lugar donde
habíamos dejado los kayaks, volver a cargarlos a la espalda y empezar el
descenso desde este lugar. Sabíamos que no iríamos bien de tiempo porque esto
significaba que tardaríamos 3 días más (un día bajar hasta los kayaks, otro día
subir y otro descender con el kayak) y visto que de comida íbamos justitos
(parte de la comida tenía moho) nos esperaba una elegante reducción en la
ración de comida para los próximos días.
El último campamento antes del descenso, a la derecha se aprecia el inicio del río
Y por fin, 3 días después de haber iniciado el trekking,
nos encontramos acampando en la esquina del lago justo donde empezaríamos el
descenso. Ya sabíamos que en el mejor de los casos no volveríamos a tener que
cargar el dichoso kayak a la espalda y solo nos dedicaríamos a descender por el
Río Kurssuaq hasta el fiordo. Estábamos con alguna que otra dolencia física,
pero ya habíamos hecho lo que menos nos gustaba, lo más duro, la satisfacción
personal era total. Ahora ya solo tocaría guardar todo en los kayaks, meter nuestros
culos dentro y empezar a palear los más de 100km de puras aguas bravas.
Lo mejor estaba por venir.
martes, 4 de octubre de 2016
Mision Groenlandia 2016. Capitulo 1. La eleccion de los ríos.
Localización del río Kurssuaq, nuestro destino de exploración. |
Mikel, Edu y Aitor partieron de avanzadilla para organizar toda la logística "In Situ" para que cuando yo llegara ya estuviera todo listo, y pudiéramos marchar directamente al río.
Desde la última reunión en Jaca, manteníamos la apuesta 3 ríos de características muy diversas, con la idea de cubrir todas las alternativas. Era algo necesario dada la poca información cartográfica de la que disponíamos.
Una vez en Groenlandia sería necesario verificar esa información. Para ello contábamos con mapas antiguos conseguidos en Nuuk pero de escalas demasiado grandes. Ciertas rutas marcadas en Google Earth rutas sin demasiado detalle. Por último teníamos también ciertas orto-fotos de satélite donadas por el glaciólogo, Eñaut Izagirre con los desniveles intensos marcados sobre el mapa. Aun así considerábamos que era necesario ver el territorio con nuestros propios ojos y por ello organizamos un vuelo en hidroavión.
Para ello contamos con la ayuda de Thomas, un aguerrido piloto amante de la aventura y deseoso de descubrir nuevos lugares para aterrizar. Se juntaron el hambre y las ganas de comer.
Organizando el material cartográfico en Nuuk en casa de Thure de Turing Greenland |
Planeando la ruta junto con Thomas (Piloto) y su mujer que venia de volar. |
Una vez en el los fiordos al sur de Sermiliq, nos dimos cuenta de que uno de los ríos elegidos con nombre "Qorossup Kugssuaq" resultaba muy peligroso. "El primer glaciar terminaba en un lago gigante creado por el bloqueo de un segundo glaciar. Cuando el fondo del segundo glaciar se derretía, se abría un paso de agua enorme, aumentando repentinamente el caudal del río convirtiendo el mismo en un foco de riadas” Las orillas delataban mucha inestabilidad mientras el río fluía con un caudal muy superior al que se le supone. Desechamos el río por muy peligroso.
El rio Qororssup fluye de lago a lago, y después se estrecha por un desfiladero creado a causa de una falla. |
Nuestro segundo reto era el río KURSSUAQ que está situado muy alejado de la costa y que durante su recorrido franquea uno de los glaciares mas grandes que la zona. Desde el avión parecía practicable por lo que este podía ser un de los elegidos para explorar.
Si lo definiera diría que tiene su comienzo en los lagos de montaña, se adentra en un glaciar robándole terreno mientras multiplica su caudal, desagua en lagos intermedios, escapa de los mismos por profundos cañones, continua valle abajo por un territorio lunar salpicado de rápidos en una sección que bien podría ser uno de los mejores RAFTING del mundo y termina desplomándose al fiordo en una cascada gigante. Creo que no había elección este debía ser nuestro río!!
Más al sur nos quedaba el río Sinarsuq que parecía tener un acceso muy complicado pero es difícil mejorar las prestaciones que nos ofrecía el Kurssuaq. Nos centramos pues en el gigante inuit llamado “Río grande” en su idioma.
Vistas del glaciar Sermiliq desde el Avión. |
Vista desde el avión del río Kursuaq. Zona media donde se intercalan rápidos con remansos provocados por el desplazamiento de tierras originado por los glaciares colgantes. |
De vuelta en Nuuk nos propusimos organizar todo en un par de días y salir a por el río Kurssuaq, solamente necesitábamos una ventana de buen tiempo para navegar los fiordos.
El viento por fin paró y comenzamos la ruta hacia Græfiord. Navegamos todo el día. De camino montamos un campamento en la desembocadura del Kurssuaq, con la intención de dejar material, comida y algo de ropa extra para nuestra llegada. Buscamos agua, un lugar resguardado y montamos el tepee. Cuanto tuvimos el campo base listo continuamos hacia el fondo del fiordo donde pensábamos iniciar la caminata hacia las fuentes del río.
Nos esperaban 3 o 4 días de caminata hasta los lagos intermedios y una exploración posterior en terreno de montaña. Montamos campamento y nos despedimos de Jhon y Thure nuestros pilotos de lancha. A partir de ahora estábamos solos. Los meses de espera por fin tenían su recompensa. Al día siguiente comenzaríamos el ascenso.
En el mapa podemos observar el campo base en frente de la desembocadura del río Kurssuaq, El primer campamento al final de fiordo y el lago donde comienza el río Kursuaq. |
domingo, 18 de septiembre de 2016
Rio Kurssuaq, presentacion de la aventura.
Después de un mes exploración en tierras árticas, ya estamos de vuelta. y he de decir que Groenlandia mola!
Durante todo este mes hemos estado surcando los fiordos del sur de Nuuk en busca de ríos de gran dificultad para explorar y descender. No es tarea fácil ya que el desplazamiento en tierras Articas es complicado debido a la inestabilidad del tiempo y la escasez de carreteras. Pero a la vuelta podemos decir que hemos encontrado una auténtica maravilla, una joya de las aguas bravas, un pepino de rio!!
Comenzamos la expedición sobre-volando el territorio a bordo de un hidro-avion, el aparato era pequeño, justo para cargar con 2 de nosotros y algo de comida que dejaríamos en los lagos superiores cerca del Inlandis. El vuelo nos sirvió para hacernos una idea de lo qué nos íbamos a encontrar durante la exploración, un terreno muy expuesto y sensible a colapsos de la naturaleza.
La expedición continuó con el acceso a pie al río Kurssuaq, el gigante elegido para la ocasión que teñía el agua del mar de un color gris claro, dejando una huella sobre el fiordo de cerca de 40 km. La cantidad de agua y sedimento que transporta este río nos dejo sin aliento, pensando durante todo el treking que posiblemente nos habíamos pasado en la elección. "Desde la avioneta se ve todo más pequeño y quizás hemos calculado mal” esta frase me rondaba por la cabeza durante todo el treking
La llegada a los glaciares nos dejó en otra situación muy comprometida, con el río extendiéndose a lo largo del glaciar durante varios caida de hielo, pudiendo este modificar el cauce o directamente bloquearlo. Jamás habíamos navegado en lugares como este y nos sentimos muy inseguros pero felices.
Posteriormente el río se veía bloqueado por dos cañones profundos y llenos de rápidos que generaban 2 lagos de grandes dimensiones. Conforme cruzábamos los lagos la dudas se iban resolviendo, efectivamente el caudal iba a ser enorme pero encontraríamos muy pocos porteos. El comienzo del rio es como gigantesca taza de water donde el lago desagua sin control entre paredes y rocas. 5o m de caída vertiginosa, dan paso a enormes rápidos encañonados.
Durante el descenso encontramos autenticas maravillas de la naturaleza como icebergs errantes, lagos turquesas o glaciares colgantes que detallaremos durante los artículos que estamos preparando.
Ahora para abrir boca, os dejo con unas fotos y os invito a revisar el blog de //Misiongroenlandia// donde encontraréis mas información sobre el viaje.
Un abrazo
Durante todo este mes hemos estado surcando los fiordos del sur de Nuuk en busca de ríos de gran dificultad para explorar y descender. No es tarea fácil ya que el desplazamiento en tierras Articas es complicado debido a la inestabilidad del tiempo y la escasez de carreteras. Pero a la vuelta podemos decir que hemos encontrado una auténtica maravilla, una joya de las aguas bravas, un pepino de rio!!
Comenzamos la expedición sobre-volando el territorio a bordo de un hidro-avion, el aparato era pequeño, justo para cargar con 2 de nosotros y algo de comida que dejaríamos en los lagos superiores cerca del Inlandis. El vuelo nos sirvió para hacernos una idea de lo qué nos íbamos a encontrar durante la exploración, un terreno muy expuesto y sensible a colapsos de la naturaleza.
La expedición continuó con el acceso a pie al río Kurssuaq, el gigante elegido para la ocasión que teñía el agua del mar de un color gris claro, dejando una huella sobre el fiordo de cerca de 40 km. La cantidad de agua y sedimento que transporta este río nos dejo sin aliento, pensando durante todo el treking que posiblemente nos habíamos pasado en la elección. "Desde la avioneta se ve todo más pequeño y quizás hemos calculado mal” esta frase me rondaba por la cabeza durante todo el treking
La llegada a los glaciares nos dejó en otra situación muy comprometida, con el río extendiéndose a lo largo del glaciar durante varios caida de hielo, pudiendo este modificar el cauce o directamente bloquearlo. Jamás habíamos navegado en lugares como este y nos sentimos muy inseguros pero felices.
Posteriormente el río se veía bloqueado por dos cañones profundos y llenos de rápidos que generaban 2 lagos de grandes dimensiones. Conforme cruzábamos los lagos la dudas se iban resolviendo, efectivamente el caudal iba a ser enorme pero encontraríamos muy pocos porteos. El comienzo del rio es como gigantesca taza de water donde el lago desagua sin control entre paredes y rocas. 5o m de caída vertiginosa, dan paso a enormes rápidos encañonados.
Durante el descenso encontramos autenticas maravillas de la naturaleza como icebergs errantes, lagos turquesas o glaciares colgantes que detallaremos durante los artículos que estamos preparando.
Ahora para abrir boca, os dejo con unas fotos y os invito a revisar el blog de //Misiongroenlandia// donde encontraréis mas información sobre el viaje.
Un abrazo
A la llegada al campo de hielo nos encontramos con estos pedazo de glaciares empujados hacia el rio. |
Mikel ajustando el carguero NRS mientras Aoitr descanso sobre una piedra. |
Bonitos campamentos a orillas de los lagos de montaña. La tienda Doite tuvo que soportar grandes tempestades y gracias a la robustez aguantamos muy dignamente. |
Navegando uno de los rapidos de la salida del cañôn. |
Mirando los rápidos desde bien lejos |
Mikel y Edu navegando entre rápidos de agua lechosa. |
Campamento al otro lado del fiordo. Tepee de Touring Greenland y nuestra tienda Doite. Al fondo el último rápido del rio Kurssuaq |
Magníficas noches de auroras boreales. |
miércoles, 17 de agosto de 2016
Groenlandia a un paso. Como empezó todo.
Icebergs flotando en la bahía de Narsaq sur de Groenlandia. Foto de 2008 |
Estamos a mediados de agosto y la noche empieza a ganar terreno al día, La temporada de verano continua agitada y todavía quedan 10 días de jaleo con el rafting. Después de trabajar duro desde febrero ha llegado el momento llevar a cabo proyectos personales como el que a continuación quiero explicar. Pero antes quiero agradecer a mis compañeros Txomin y Chema el apoyo que me brindan con este viaje tan especial. Gracias por ayudarme a aprovechar esta oportunidad… A la vuelta espero veros preparando el viaje al Cañón de Colorado de este otoño os deseo mucha suerte!!
Ahora me centraré en Groenlandia. Por fin ha llegado el momento de llevar a cabo la aventura. Comienza un viaje de kayak de exploración, una aventura de las de recordar. El objetivo que nos marcamos cuando comenzamos con esta "ida de olla" era explorar un territorio virgen con ojos y manos de piragüista, un lugar lejano, con ríos, en territorio virgen y para ello nos hemos venido hasta Groenlandia.
Todo empezó en Nepal, planeando la ruta del Humla Karnali. Nos sentábamos frente a la recepción de un hotelucho en Pokara. Mikel hablaba de su amor por los territorios fríos, áridos y extremos. Mientras preparábamos la expedición me hablaba de Groenlandia, y del calentamiento global. Como podía llegar a ser un destino para futuros piragüistas. Yo, que realmente había estado en la Isla, no pensaba que podríamos encontrar grandes joyas pero su pasión me daba ánimos para acompañarlo en su búsqueda. Prometí contactar con Javi Galvez e investigar sobre las posibilidades de esta tierra inhóspita.
La isla de los Inuit no siempre ha estado helada. Hacia el año 1000 las altas temperaturas disponían a la población de una manera muy diferente. El viejo continente se cocinaba de calor mientras pasaba hambre entre sequía y sequía. Los vikingos encontraron un clima muy propicio en tierras escandinavas y aumentaron la población comenzando su expansión hacia Europa del sur, y America. Es de estos pobladores de donde proviene la palabra Groenlandia (greenland en ingles), tierras verdes. Durante casi 200 años los vikingos habitaron el sur de la isla, dejando pequeños vestigios hasta el comenzó la pequeña era glaciar de la edad media.
Hoy en día la isla cuenta con una masa de hielo de hasta 3 km de grosor que acumula cientos y cientos de capas de hielo desde tiempos muy lejanos. Los científicos buscan partículas atrapadas en el hielo para conocer el pasado. El mar es un entorno más cambiante, durante el invierno se hiela y los barcos dan paso a las motos de nieve. Algunos todavía se mueven con medios tradicionales como los trineos de perros. Pero cuando llega el verano, parte de la capa de hielo no permanente de derrite. Es en este tipo de terreno donde se inventó el kayak un forma excelente de surcar un batido de agua y hielo donde abunda la comida.
Nuestra exploración se centró principalmente 3 manchas de tierra que aparecen sobre esta blanca masa de hielo. Los glaciares empujados por la fuerza del "inlandis" ceden aquí ante el avance de la roca. Debido al retroceso de los mismos aparece un paisaje de montaña y lagos con vastos terrenos de tundra y roca desnuda. Los ríos fluirán en este ambiente polar desde los glaciares hasta el mar, cada uno con unas características diferentes.
Las fuentes se encuentran a una altitud media de 500m sobre el nivel del mar, dependiendo de la longitud de cada río encontraremos un desnivel mayor o menor. La idea es navegarlos desde las fuentes hasta el mar. Uno a uno, montando un campamento base en los fiordos. Creo que muchos conoces el proyecto ya…
Con estos ingredientes nos encontramos en Groenlandia a punto de partir a lo desconocido. Personalmente me encuentro emocionado, esta vez me siento de verdad un explorador. Solo la sensación me emociona y da sentido a todos los "porteos de la muerte" que nos toca hacer. Vamos a ver que tal sale!!
Quiero además destacar la ayuda de los patrocinadores de este viaje sin los cuales el proyecto habría sido imposible. Touirng greenland, Turismo de Groenlandia, Artic Yeti, NRS, AML Sport, Ternua y Fase Asesores. Además quiero dar las gracias a los patrocinadores que me ayudan durante todo el año como Jackson kayaks, Ape Stuff, Doite y River Guru. Muchas gracias to todos por hacer esto posible.
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